sábado, 1 de septiembre de 2007

Ironias de la vida

Viendo el noticiero local, me llamo mucho la atencion un nota acerca de un indocumentado mexicano, residente de Houston, que recibio casi a la par 2 cartas, una del presidente Bush dandole las gracias por haber ofrecido al pais el mas grande sacrificio que un padre puede dar al entregar la vida de su hijo que murio en la guerra de Irak. El muchacho quien apenas contaba con 20 años de edad, al igual que muchos mexicanos en este pais, se enlisto en el ejercito con la esperanza de obtener la ciudadania estadounidense para el y poder legalizar la estancia en este pais para su familia, pero la vida le jugo un reves y murio en batalla antes de poder hacer realidad su sueño.
La otra carta que recibio el padre del muchacho fue una por parte del departamento de migracion y era nada mas y nada menos que una orden de deportacion, asi como lo leen.
Bush le agradece el sacrificio "mas grande" que un padre puede ofrecer pero al mismo tiempo le piden que agarre sus triques y se regrese a Mexico, o sea, thank you, bye!
Que ironia! ahora la familia teme la deportacion del patriarca y ha contratado los servicios de un abogado experto en inmigracion, quien asegura que el caso es dificil pero estan tratando, con la ayuda de unos congresistas locales, que se le "perdone" la ofensa de haber entrado ilegalmente al pais y le otorguen el perdon junto con la residencia, pero nada es seguro, el abogado asegura que migracion puede, en cualquier momento, ejecutar la orden, aprehenderlo y deportarlo.
Curiosamente no es el unico en esta situacion, hay muchos casos como este, cuyos hijos muertos en Irak no les han dado siquiera el beneficio de obtener una estancia legal en este pais.
Las redadas son cada vez mas frecuentes y mas agresivas, migracion esta tratando cada vez con mas fuerza, de echar fuera del pais la mayor cantidad de ilegales posible y lo esta logrando.
Muchas familias estan quedando separadas en la distancia y cada vez mas pequeños, ciudadanos estadounidenses hijos de padres ilegales, se estan quedando solos al amparo de familiares o amigos, pero lejos de sus padres.
Mientras tanto, a la vispera de las elecciones presidenciales del proximo año y con el fracaso de la reforma migratoria, algunos de los precandidatos tratan ya, de ganar el voto de los hispanos, prometiendo, ahora si de a de veras, una reforma migratoria justa para todos.
Solo el tiempo nos dira si estas promesas son reales o solo de campaña, no nos queda mas que esperar y albergar la esperanza de que toda esa gente trabajadora que engrandece la economia de este pais, reciba el trato digno y el estatus legal que se merecen.

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